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domingo, 11 de noviembre de 2012

El espejismo de nuestra vida

Sí, sí, el título es correcto, has leído bien, la vida que vivimos es una ilusión mental y como toda ilusión se puede transformar, podemos diseñarla a nuestro gusto. El principal problema reside en que prácticamente nadie cree que esto pueda ser así, que nosotros podamos ser los creadores y diseñadores de nuestra vida, de nuestra felicidad. Desarrollemos esto.


    Empecemos con un poco de física cuántica para entender mejor lo que explico a continuación: todas las materias de este mundo material están compuestas de átomos, y a su vez estos están formados por partículas subatómicas tan pequeñas que no es posible observarlas directamente (ni siquiera con sofisticados microscopios electrónicos), solo se puede medir su huella, además, según los científicos, poseen la curiosa propiedad de actuar como partícula cuando se las "observa" y como onda en el resto de los casos. Las ondas no son materia, son energía, como lo es la luz. Dicho esto podemos asegurar que la materia está compuesta por energía, incluidos nosotros, y una de las leyes de la física más popular dice "la energía no se crea ni se destruye, únicamente se transforma". Tanto es así que un experimento en el acelerador de partículas del Cern consiguió convertir una partícula de plomo en oro, lo que nos demuestra que una materia puede ser transformada en otra diferente, trabajando sobre sus energías subatómicas. A nivel biológico hoy en día ya sabemos que existen un tipo de células llamadas "madre" que son capaces de transformarse para poder formar cualquier tipo de tejido del cuerpo, de hecho ellas son las que construyen nuestro cuerpo en la fase embrionaria.

    Esto nos deja entrever que incluso lo que nosotros creemos que no se puede transformar como la materia misma, sí que puede convertirse en otra realidad, porque es energía. Todo y todos formamos parte de una unidad universal, de algo mucho mayor que permite que existamos. Lo mismo ocurre a nivel subconsciente, la inconsciencia de la que formamos parte, es como el inmenso cielo que contiene las nubes individuales (las personas), cuando éstas se deshacen vuelven a formar parte del mismo aire que compone el cielo. Eso mismo ocurre con nosotros, nuestra mente material hace que nos veamos como entes individuales, que no tienen nada que ver los unos con los otros, y que tan solo creen en lo que sus limitados cinco sentidos sensoriales son capaces de captar, así nos ha educado la sociedad, extirpando nuestra parte que está por encima de esos cinco sentidos, haciéndonos olvidar que realmente estamos compuestos de lo mismo que ese cielo del que hablábamos y que cuando abandonemos esta materialidad volveremos a formar parte de él. Todo es temporal en esta vida, todo nace y muere, por eso mismo podemos afirmar que todo lo que existe es una ilusión mental creada por nosotros mismos, es nuestra realidad, la de nuestro ego aferrado a esta vida, de ahí que cada persona puede ver el mismo mundo de modos muy diferentes, tal y como su mentalidad lo construye para ella.



    Saber que todo es modelable con energía, pues de ésta se compone, tener presente que somos seres creadores capaces de crear lo que nos propongamos y que nuestra energía mental es capaz de materializar aquello con lo que realmente soñamos, es un conocimiento sublime, es como volver a darle las alas a un ave que las perdió y ya no podía volar. Es por ello que hay personas que de una vida muy pobre y llena de desastres han pasado a ser famosos triunfadores, y otras a las que les ha ocurrido lo contrario. Todo lo que nos llega en el tiempo es lo que hemos ido construyendo a nivel mental, pues todo lo que consigamos ha pasado antes por nuestra mente. El poder oculto que reside en ella y que nos permite poner en marcha nuestra fábrica de sueños es nuestro poder de atención, la realidad que nos rodea se va construyendo en base a lo que más centramos nuestra atención. Haz un pequeño experimento, coge una moneda de 1 euro y mírala fijamente, observa todos sus detalles, pálpala con tus dedos, préstale toda tu atención durante unos minutos, verás como en los siguientes días encontrarás monedas de 1 euro cuando menos te lo esperes y de manera más frecuente de lo habitual.

    Para centrar adecuadamente nuestra atención primero debemos saber muy bien qué es lo que deseas realmente desde lo más profundo de tu ser, para averiguarlo lee este post. Es necesario conocer lo que de verdad deseas en tu vida pues así es mucho más sencillo mantener tu atención centrada en conseguirlo. Este ejercicio también puede ayudarte a entrenar tu poder de atención y tener un mayor control sobre él. Lo siguientes pasos para mantener tu poder de atención centrado en traer a la realidad tus sueños están explicados en las tres partes de ¡Tus deseos son ordenes para mí!

    Espero que lo aquí explicado abra tu mente y fortalezca tu fe, para que puedas tener la certeza de que tu vida puede ser mucho mejor de lo que es, de que tus verdaderos deseos pueden hacerse realidad, de que con amor, perseverancia y positivismo se puede construir una vida mucho mejor para todos... ¿no te lo crees? Pruébalo, no tienes nada que perder, pero sí mucho que ganar: tu felicidad.


Muchas gracias por leer mis palabras. Contribuye con tu comentario.


1 comentario:

  1. El texto anterior me pareció interesante, es un tema que nunca había leído , sin embargo me llamo mucho la atención debido a que cada persona tiene perspectivas diferentes sobre la vida, pero ciertamente se pueden alcanzar metas solo con el hecho de centrar la atención a lo que realmente se desea, para así alcanzar la verdadera felicidad.

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