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domingo, 27 de noviembre de 2011

¡Tus deseos son ordenes para mí! (Tercera parte)

En esta tercera y última parte de esta entrada relativa a los deseos vamos a tratar cómo redactar y utilizar las "metas" que nos aportarán una comunicación efectiva con nuestra mente subconsciente para poder materializar esos deseos que ahora ya conocemos con seguridad. El éxito ya es tuyo.



    Ahora que ya sabes realmente lo que deseas aportar a tu vida, es el momento de ponernos manos a la obra y preparar nuestra mente subconsciente o mente creadora para que "fabrique" aquello que queremos poder disfrutar con nuestros cinco sentidos en esta hermosa vida material.
Como indicaba en la primera parte de este tema para poder conocer todos los detalles de este método y entenderlo de manera más completa habría que realizar una lectura del libro "El secreto del poder de las metas" del autor Andrew Corentt, obra sobre la que se basa esta entrada y que me hizo entender y conocer qué es lo que yo deseaba de verdad y cómo traerlo a mi vida, hoy eso es ya una realidad.

    Es el momento de formular nuestra meta, y ésta debe tener ciertos requisitos:

  • Debe ser clara y concisa, sabemos lo que queremos y cómo lo conseguiremos, utilizando lenguaje directo pero que sea muy nuestro, utilizando "yo estoy" o "yo soy", siempre en tiempo presente, no en futuro pues en ese caso le damos a nuestra mente la sensación de que ese deseo nunca será nuestro pues siempre estará pendiente de cumplise en el futuro.

  • Siempre debe ser formulada de manera positiva, es decir, no escribiremos acerca de lo que queremos eliminar de nuestra vida, sino de lo que sí queremos aportar a ella. También debemos expresar las acciones que realizaremos para obtener lo deseado.

  • Debemos establecer una fecha límite para su cumplimiento, debe ser una fecha racional para que lo que deseamos pueda llegar a materializarse. (No podemos desear construir una casa de un día para otro); pero sí dejaremos la posibilidad de que pueda cumplirse antes de la fecha indicada, utilizando expresiones como "Antes del 15 de diciembre...." o "como muy tarde el 15 de diciembre...".

  • El deseo debe ser cuantificable, tenemos que poder saber cuando se ha cumplido, porque podemos contar lo que hemos recibido; por ejemplo, en el caso de ser dinero pondremos una cantidad exacta, o en el caso de ser un coche escribiremos su marca, modelo y color, por lo que será fácil reconocer cuando se ha cumplido, pero si es algo abstracto, como por ejemplo, mejorar la relación con nuestra pareja deberemos encontrar el modo de cuantificar esto comparándolo con algo que se pueda medir, por ejemplo en la meta: "Antes del 15 de diciembre de 2XXX, yo estoy disfrutando de excelentes relaciones con María, lo cual se refleja en el hecho de que más del noventa por ciento del tiempo que pasamos juntos lo disfrutamos tanto, o más, que cuando comenzamos a salir." En la parte subrayada hemos cuantificado algo tan difícil de medir como mejorar la relación con alguien, de este modo sabremos que cuando la mayoría de nuestro tiempo junto a esa persona estemos disfrutando mutuamente de la compañía podremos dar nuestro deseo por realizado.

  • Debemos incluir unas cláusulas para evitar los efectos paralelos no deseados, pueden valer: "Todo esto o algo mejor""maneras que me aportan felicidad a mí y al universo" y también una cláusula de facilidad como: "De forma rápida y sencilla". Ya hemos explicado que nuestra mente subconsciente no es racional a la hora de traer cosas a nuestra vida, por lo que debemos tener cuidado de los detalles cuando redactamos nuestros deseos, por ejemplo, podemos desear una preciosa casa de campo y cuando ésta se hace realidad puede que nos toquen unos vecinos fastidiosos o que nuestra casa sufra graves problemas de humedad, estos detalles arruinarían la perfección de nuestro deseo, por lo que la utilización de estas cláusulas puede evitar la aparición de estos puntos negativos.



Un par de ejemplos de metas bien redactadas:

- "Antes del 15 de diciembre de 2XXX, yo estoy disfrutando de excelentes relaciones con María, lo cual se refleja en el hecho de que más del noventa por ciento del tiempo que pasamos juntos lo disfrutamos tanto, o más, que cuando comenzamos a salir.
Todo esto, o algo mejor, ocurre de forma fácil y rápida y de maneras que me aportan felicidad a mi y al universo, porque yo me he enfocado en lo positivo de nuestra relación y en lo mucho que disfrutamos estar juntos, al mismo tiempo que apoyo su desarrollo personal."


- "Como muy tarde el 20 de noviembre de 2XXX, yo tengo 20 millones de euros en el banco, porque soy el ganador del premio de primera categoría del sorteo de XXXX.
Todo esto, o algo mejor, ocurre de forma fácil y rápida y de maneras que me aportan felicidad a mi y al universo, porque yo apuesto siempre  en el sorteo de XXXX."

    Las estructura del redactado de la meta puede ser similar a estas, pero una vez escritas debemos leer varias veces con calma y "sentir" las principales palabras del escrito para asegurarnos de que nos sentimos cómodos con ellas. Ésta meta es nuestra y las palabras de ella deben hacernos sentir bien, así que utilizaremos nuestro vocabulario.

    Ya es el momento de interiorizar nuestra meta y grabarla en nuestro subconsciente para que éste realice su trabajo. Para ello debemos mantener nuestra meta presente en nuestra consciencia a diario, cosa que no nos debería costar demasiado, pues ese deseo sabemos que es muy importante para nosotros y nuestra atención se mantendrá centrada en él. Como herramientas utilizaremos la lectura, escritura y visualización: leeremos nuestra meta cada día recién despiertos y antes de dormir (tanto por la noche como si hacemos siesta) sintiendo que eso que deseamos ya es nuestro; en estos momentos nuestra mente consciente está más relajada y la comuncicación con el subconsciente es mayor. Además de leerla también sería de ayuda visualizar la realización de nuestro deseo, con todos aquellos detalles con que lo vimos cuando lo refinamos tal y como indicaba en la segunda parte. Cada día tenemos que escribir nuestra meta entre diez y veinte veces, con letra clara y escritura sosegada, con cariño y amor, pues esa escritura nos va a aportar algo muy deseado en nuestra vida, podemos hacerlo una vez cada día o tantas como consideremos, pero no lo convirtamos en una obsesión. Éste es nuestro trabajo básico diario para poder cumplir nuestros sueños, como veis el método es muy fácil, pero como ya dije requiere fe en lo que haces, fuerza de voluntad para no abandornarlo pase lo que pase y sentir amor por ti mismo y por lo que deseas; puedes introducir nuevos elementos o formas de interiorizar tu meta con las que te sientas comodo/a, pero lo que sí te aseguro que siguiéndolo y mezclándolo con los principales ingredientes antes citados las posibilidades de éxito son enormes.

    Muchas gracias por leer mis palabras.

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